Residencia Kaik nº7

Dio un salto en la bañera que hizo que todo el agua se saliese. Se levantó desnudo y cuando vio que estaba allí Will se tapó la entrepierna sonrojandose ligeramente.
-P-Pero si solo estaba bañandome!-le dijo buscando una toalla-Por cierto, tantas ganas tenías de verme desnudo que no has aguantado a esta noche, pervertido?-bromeó con él mientras movía el culo de un lado a otro como si estuviese bailando.
Se salió de la bañera y se dirigió a la puerta, cuando pasó por al lado del pelinaranja le vio la cara.
-Will? Que te pasa?-le tomó por los hombros obligandole a alzar la cabeza-Estás bien?

Se había perdido en sus recuerdos otra vez... Era ironico, lo que más odiaba era su pasado y sin embargo su mente se lo rememoraba una y otra vez como si se tratase de un juego macabro y él el jugador. Suspiro pesadamente incluso ignorando esos comentarios de Yuuki que normalmente habrían hecho que se pusiese rojo hasta la raiz del pelo.

De repente sintió como Yuuki le cogía de los hombros obligandole a mirarle. Aquellos ojos que reflejaban preocupación... No pudo evitarlo, se mordió el labio inferior antes de bajar la mirada y notar como varias lágrimas descendían por sus mejillas.

-L-lo siento.-se disculpó para luego abrazar al medio alemán... simplemente lo necesitaba...

Le devolvió el abrazo y hundió la cara en su pelo.
-Venga, no llores y si lloras sueltalo todo, estarás mejor-le dijo abrazandolo con fuerza para que se tranquilizase-Has leido mis libros? Te han gustado?-dijo animadamente intentandolo así hacerle pensar en otra cosa.
Le sonrió con dulzura para que supiese que estaría allí para lo que fuese. Si necesitaba hablar de ello podrían hablarlo, pero si prefería olvidarlo siempre podía contestar a su pregunta y cambiar de tema. Eso sí, seguía desnudo con una simple toalla atada en su cintura.

Se quedó un rato más así, abrazando al moreno sin moverse mientras las lágrimas de frustración bajaban por su rostro. Asintió suavemente a las preguntas del medio alemán sin soltarle. Entonces recordó como estaba Yuuki y el color se le fue del rostro ¡Por todos los simbolos del zodiaco! Se separó de él, limpiandose las lágrimas con el dorso de la mano, llevaba una chaqueta algo grande, pero siempre le gustó la ropa de ese estilo.

-A... jajaja... no se lo que me ha pasado, te espero fuera a que te cambies-dijo sonriendo de forma algo forzada y salió del cuarto de baño apoyandose en la pared de al lado. Acarició a Kyle que estaba allí mientras esperaba a que el chico saliese.

Siguió a Will sin inmutarse y se quedó mirandolo fuera del baño. Kyle ladró al ver a su amo y...agarró la toalla con sus fauces, tiró de ella y salió corriendo escaleras abajo. El sonrojo de Yuuki volvió a mostrarse.
-KYLE! -y salió corriendo tras el dalmata a toda pastilla.

La primera reacción de Will ante aquello fue sonrojarse como un tomate maduro, la segunda... reirse a carcajada limpia casi tirandose al suelo de la risa. Lo sentía mucho por Yuuki pero... adoraba a ese pequeño perro. Les siguió aunque a paso lento, esperando a que Kyle ya le hubiese devuelto la toalla a Yuuki, no quería encontrarselo completamente en bolas... Volvió a reirse ante la idea.

Consiguió coger a Kyle y ponerse la toalla. Entonces escuchó las risas de Will y se autosonrió. Cuando lo vio bajar por la escalera se acercó a él y le dio un abrazo.
-Estás mejor riendote-le tiró de la mejilla mirandole.
Le dio un mordisco suave en la nariz para picarle y salió pitando escaleras arriba para cambiarse.

[Siento no haber respondido antes ;A; pero es que estaba atrapada con los malditos examenes y tuve que estudiar un ratazo y luego tuve una muerte neuronal bastante grande. Mañana ire a responder los de yaoi mix]

En cuanto vio a Yuuki no pudo evitar sonreir, claro que la sonrisa paso a un inmediato sonrojo en cuanto le abrazo y casi estallo de la verguenza cuando el chico le mordio la nariz.

-¡Yuuki!-exclamo completamente rojo cuando el otro subia por las escaleras. Aquello habia sido... raro y se habia sentido raro. Sacudio su cabeza varias veces alejando pensamientos estupidos mientras se llevaba las manos a los bolsillos e iba de nuevo al cuarto del medio aleman a seguir leyendo.